Aullidos del fin del mundo

viernes, 16 de agosto de 2019

Desencanto

Cuando mejor escribo es cuando más triste estoy, pero creo que esta rabia, este dolor que emerge de dentro nunca había expulsado tanta oscuridad hacia el exterior. Soy consciente de que eso es algo que también se suele pensar cuando te traicionan, que esa siempre será "la peor", que el dolor será tan inconmensurable que te quieres morir, pero siempre puede haber algo peor, siempre habrá otra oportunidad para darte cuenta de que la vida encierra demasiadas habitaciones con clavos. 

No creo que haya nada que pueda calmar esto. No creo que esta sangre que brota de mí pueda llegar a cerrarse pronto. Creo que la lección más importante que puedo sacar de aquí es la de saber que al menos mi lucha siempre es hasta el final, que no huyo en la batalla, sigo fiel a la causa. Ahora sé lo que se siente cuando intentas acceder a alguien pero te apartan sin saber el motivo. Ahora entiendo como es combatir a la oscuridad desde el otro lado, desde el lado ciego, donde lo único que quieres es ayudar como sea, lo único que te importa es que vuelva a la vida, aunque te destrocen por el camino. La oscuridad está en ambos lados, eso es lo más asombroso. No hay un oasis. 

¿Qué ha pasado contigo? ¿De dónde provienen estos fantasmas, a dónde se ha ido la confianza? Esta sensación de desencanto, de desasosiego, de lágrimas en la piel. Estos arañazos no solo están en las paredes. Esta forma de caer me está volviendo loco. Estas líneas se están desdibujando, ni siquiera sé donde se inició todo. Este espectáculo es macabro. Ni siquiera la tormenta logra que me sienta bien bajo la lluvia. No quiero beber más de este agua, no quiero volver a sentir la decepción. Desaprobé los ojos verdes una vez, me juré no volver a adentrarme en este mundo de cuentos sin finales felices, pero hay corazones que no son capaces de entender que a más pedazos más dolorosa es la reconstrucción.

No lo vi venir. Sin propósito, sin redención. Supongo que no bastará con que aguante despierto. Es como un alud de mierda encima de mí. Estoy en un gran montón de basura, nadado entre bolsas y excrementos. Voy a romper lo que ya está roto, voy a romperme hasta que vuelva a vivir en los días no vividos. 

Sería absurdo que no me influyese, sería muy absurdo cambiar de idea y de sentimientos en unas pocas semanas. Sería absurdo abrazar a quien quiere tu bien. Abandonar es siempre la mejor opción, ¿no? Creo que lo que peor voy a llevar es pensar que en las fotos saldríamos felices. Creo que asustarse es la opción más fácil, también creo que es la equivocada. 

Demasiados ápices, demasiadas lágrimas, demasiado amor. 

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