Aullidos del fin del mundo

sábado, 30 de noviembre de 2019

Despedida

Escucha lo que pienso mientras intento aprender a escuchar a quien quiero que vaya dirigido. 
Tengo tanto miedo para tan poco peligro que a una parte de mí siempre le toca perder. Me despido antes de tiempo, antes de que sea el final verdadero. Quizás debería arriesgarme a darle una oportunidad más, a no renegar de aquello que me entusiasma. Dejar de negar lo evidente y subirme a ese avión. 

Todo este tiempo me he sentido apartado, dolido y excluido. He sabido que están ahí, los he visto, los he notado. Ellos no quieren estar conmigo. Lo intentaron, pero la época pasó. No puedo quedarme esperando y no hacer nada. 

Cada vez se me hace más difícil conectar con nadie. Siento que voy a la deriva emocional. Es como si a medida que crezco es más difícil intentar encontrar a alguien que pueda entenderme. Mejor dicho, alguien que quiera intentar comprenderme. Puede que sea demasiado complicado. Puede que no valga la pena darme una oportunidad, apostar por este exoesqueleto. Han intentado excavar tantas veces y la respuesta que he obtenido siempre ha sido la misma. Supongo que estoy más roto de lo que creía. 

Esta vez toca elegir bien las palabras o ni siquiera el fénix será capaz de alzar el vuelo. Esta vez la tinta me dará un mensaje más poderoso. Quiero tatuarme la valentía que sé que tengo en algún lugar. Quiero olvidarme de la idea de que mi pasión no tiene ningún futuro, sobre la idea de que mi único don no sabe brillar por sí solo. No volveremos nunca más a esta década, y aun así la recordaremos, como todo lo que tiene un significado para nosotros. Pues la memoria es nuestra huella más profunda. 

Debo aventurarme más allá, justo donde lo dejé. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario