Aullidos del fin del mundo

lunes, 3 de diciembre de 2012

Disconformidad permanentemente transitoria

Creo que es cosa de la ambigüedad. Mi vida se puede entender de distintos modos, se puede interpretar de distintas maneras, pero por consiguiente siempre hay dudas. La confusión impera. Ya no creo que lo que busque sea un motivo de supervivencia, algo me dice que ya solo basta con la ambición (o la emoción). ¿Qué puedo hacer por mejorar? 

¿Va a ser toda la vida así? Uno tras otro, día tras día. Ya no sé como comportarme, ni siquiera sé como soportarme. El círculo ha ido forjándose y lo único que queda es esa delgada línea entre lo real y lo imaginario. Me pierdo ahí. 

¿Puede algo salvarte y ser al mismo tiempo tu destrucción? Necesito describir y solo escribo sobre mí. Debo dejar de hacer eso. Debo salvarme, y esto, una vez más, es algo que debe de quedar en tierra de nadie. 

Sin gracias. Con diferencia. 

1 comentario:

  1. ¿Y quién dice que la ambición no sea un motivo de supervivencia? Creo que hay cosas que aparentemente parecen ser contradictorias pero que en realidad son complementarias. Quizá ésta sea una de ellas. Puede que la ambición no sea una manera adecuada de supervivencia pero creo que a veces nos resulta necesaria.
    Esa delgada línea entre lo real y lo imaginario se asemeja demasiado a la indiferencia y a veces eso nos lleva a sentir una ligera melancolía. Somos tan ambigüos como complejos.
    "¿Puede algo salvarte y ser al mismo tiempo tu destrucción?" Pues creo que no hay salvación sin destrucción. Quizá están tan cerca la una de la otra que a veces nos cuesta distinguirlas... Y una vez salvados estamos en riesgo de caer en la destrucción. Es un círculo de caida inevitable a la que le sigue la redención...

    Me gusta mucho cómo te expresas!
    Disfruta de la vida Foster!

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